El estrés laboral es una patología cada vez más frecuente que deriva de situaciones diversas, como un mal ambiente laboral, un jefe difícil de tratar, extenuantes jornadas laborales, baja remuneración salarial, presión por cumplir objetivos imposibles, entre otros.
No saber gestionar el estrés puede generar graves problemas a la salud como ataques de ansiedad constantes, depresión, migrañas, alteraciones digestivas, problemas cardiovasculares, sobrepeso, agotamiento crónico, debilitamiento del sistema inmunológico, y más.
Reducir el estrés laboral y promover una cultura empresarial en equilibrio es posible identificando los principales causantes de estrés, si bien muchas veces no depende de una sola persona el cambio de toda una empresa, el cambio de manera personal comenzará a afectar el resto de tu entorno de manera positiva, dado que la forma en que actualmente te afecta el estrés tomando algunas de las siguientes recomendaciones BIBO.
Aliméntate Sanamente
La química de nuestro cuerpo puede verse restaurada por medio de una alimentación saludable que aporte a tu cerebro los nutrientes que requiere para regular sus funciones hormonales, entre ellas la producción de serotonina, el neurotransmisor que produce la felicidad.
Descansa lo suficiente
Dormir bien hace que tu cuerpo y tu cerebro se mantengan relajados y renovados, un buen descanso produce una buena reparación de todos los sistemas corporales para que tu cuerpo trabaje adecuadamente, la ausencia de enfermedad también es motivo de felicidad.
Realiza actividad física
El ejercicio deportivo o recreativo tiene la capacidad de hacer magia, sentirnos bien eleva nuestra autoconfianza y ello nos ayuda a sentirnos en control, generándonos bienestar.
Ten un pasatiempo
Incluye entre tus responsabilidades una actividad que te haga olvidarte por un momento de todas ellas, un pasatiempo sano y que, preferentemente, aporte un valor personal y para otras personas te ayudará a sentirte relajado y valioso.
Reúnete con tus seres queridos
Rodéate de amor y de energía que te contagie la buena compañía, te ayudará a darte cuenta de que no estás sólo y que eres importante para aquellos que también son importantes para ti.
Sal de tu zona de confort diariamente
Rétate a hacer algo inesperado, como bañarte con agua fría, probar un restaurante nuevo, conocer nuevas personas o escuchar una nueva canción. Ello te hará ver que eres capaz de lograr cosas que ni siquiera habías pensado.
Practica técnicas de respiración
Una forma de relajación inmediata es la respiración consciente, práctica realizar 5 respiraciones profundas inhalando por 5 segundos, sosteniendo el aire 5 segundos y exhalando en otros 5 segundos, esto te ayudará a volver al momento presente, a recordar que estás vivo y que puedes sentirte mejor.
Acude a terapia
Si consideras que los motivos de tu estrés te rebasan y no logras superarlos porque aún no has aprendido cómo hacerlo, siempre es una gran alternativa acudir con un profesional que nos escuche y nos apoye a gestionar las situaciones que nos generan malestar.
Automotívate
La felicidad es un efecto compuesto, es decir, una elección del día a día que será consecuencia de tu forma de pensar, hablar y actuar, procura que tus pensamientos, palabras y acciones jueguen a tu favor.
Cambia de empleo
Es posible que descubras que el motivo de tu estrés es que no te sientes satisfecho con tu empleo actual por una falta de sentido de propósito, averigua qué es lo que más te mueve y ve por ello.
Tomar acción para generar una cultura de bienestar es esencial para eliminar el estrés y mantener un adecuado equilibrio emocional, generar una cultura corporativa sana comienza por ser una persona sana.