La empatía es un término que ha alcanzado mucha popularidad y que en muchas ocasiones brilla por su ausencia en los ambientes laborales, para que no sea el caso de tu empresa te invitamos a conocer más acerca de la empatía y cómo puede ayudarte utilizar esta herramienta en el trabajo.
El rol de la empatía en el campo de trabajo juega un papel de suma importancia y al que pocas veces se le da una participación adecuada en la solución de conflictos laborales, siendo este espacio el lugar más apropiado para utilizarla.
Ser empático es un superpoder que lucha contra la actitud negativa, la carga de tareas, la prisa y la presión, e implica ser capaz de “ver más allá de nuestras narices” para poder “ponerse en los zapatos del otro”, implica aprender a desapegarse de las situaciones como un tema personal y buscar las soluciones adecuadas para beneficio de todos.
Saber usar esta competencia implica un grado de consciencia que requiere de la comprensión de todas las partes que intervienen en un proceso laboral, entender las necesidades, preocupaciones, sentimientos e implicaciones de cada célula para saber colaborar en conjunto mediante una adecuada comunicación.
En ocasiones, sucede que un empleado no tiene definido su rol y las tareas propias a desempeñar, no tiene claro que es lo que la empresa espera de él cuanto a su comportamiento y desempeño, generando una interpretación ambigua acorde a la personalidad de cada individuo, ante ello, una solución con la que debe contar una compañía es una cultura de trabajo que defina el actuar esperado de cada una de sus partes.
Es decir, que la empatía parte desde la creación de la cultura corporativa, con ello nos referimos a su misión, visión, filosofía y valores que, asimismo, permiten que la selección del personal sea la más adecuada a las necesidades y objetivos de tu empresa.
Por ello BIBO te sugiere que no te quiebres la cabeza tratando de entender el mundo individual de cada uno de tus colaboradores, revisa tus principios, asegurate de incluir a la empatía en tu cultura empresarial y las partes que no encajen con ella serán las que deberán irse podando como hojas secas en un árbol, teniendo en cuenta como el primer principio de la empatía que tu forma de ver las cosas debe tener en cuenta de manera válida a los demás miembros de tu compañía para generar una sinergia de crecimiento hacia todas las partes.