Esta es una iniciativa que practicamos en BIBO para ayudar a nuestros colaboradores a sentirse más satisfechos con su trabajo, aumentar su motivación y compromiso, y mejorar la productividad.
La gratitud es una actitud que se puede cultivar, esto significa que si no es un hábito diario que se incluya de manera consciente entre tu personal, puedes incluirlo como parte de la jornada hasta que se vuelva un hábito que puedan replicar de manera consciente en sus vidas y en su empleo.
La gratitud nos ayuda a tener una perspectiva más positiva de frente a la rutina y los retos cotidianos, ayudando a los empleados a sentirse más motivados con la función que desempeñan y que gracias a ella son parte de un crecimiento que genera bienestar para ellos y para otras personas que laboran en las diferentes empresas. A su vez esto genera una actitud de compromiso, ya que saberse parte de algo mayor mejorará su actitud y desempeño.
La gratitud también puede ayudar a los empleados a sentirse más conectados con sus compañeros de trabajo. Cuando los empleados se sienten agradecidos por el trabajo que hacen juntos, esto puede mejorar la colaboración y la productividad.
La gratitud es un boomerang que lanzas al hacer conscientes las razones que tienes para sentirte satisfecho al darte cuenta de que estamos en una posición digna al día de hoy, cuando ese boomerang regrese a ti encontrarás que tus motivos para estar agradecido se han multiplicado.
Por lo tanto, aprender a practicar la gratitud para tener un mejor desempeño en el trabajo puede ayudarte a ser consciente de la satisfacción que te genera, de los beneficios que te aporta y del bienestar al que contribuimos.
Si al practicar la gratitud encontrarás que no te sientes realmente satisfecho con todo lo que tienes y has logrado a lo largo de tu día y de tu vida, puede ser un buen momento para plantearse ¿qué te haría sentir realmente agradecido y cómo es que puedes conseguirlo?, dar un giro a tu situación y mejorar.
Te invitamos a realizar un ejercicio diario en tu empresa, en el que de manera personal o colectiva encuentres 5 cosas por las que puedes dar gracias el día de hoy y procures ir descubriendo nuevas al siguiente día, te darás cuenta que las razones para estar bien no tienen un fin y aún dentro de lo malo, enfócate en lo bueno que cada situación aporta a tu vida.